1440 ¿Un simple número o hay algo más?
Muchos de vosotros, al ver ese guarismo, ya sabéis por dónde van los tiros en el día de hoy, vamos a iniciar una ligera reflexión sobre ese preciado y escasísimo bien, que no tiene precio, y que se llama tiempo.
Todos los días, recibimos un maravilloso regalo formado por 1440 minutos, de los que solo podremos disfrutar una vez, ¡aquí no vale reciclar! , la ley del tiempo es irrefutable, minuto que no usas ¡a la basura! Minuto que no usemos, no volverá jamás.
Debemos entonces encontrar el equilibrio en la administración del tiempo, de nuestro preciado tiempo ¿no te estás quejando todo el día que no tienes tiempo para nada? Pues quizás sea el momento de que nos demos una vueltecita de tuerca…
Jamás debemos decir que no tenemos tiempo, se nos conceden los mismos minutos diarios que se les concedió a la Madre Teresa, Albert Einstein, Leonardo Da Vinci, Miguel Angel, Pasteur, o el padre Ferrer.
Deberíamos intentar “vender” la mayor parte del tiempo que podamos a cambio de satisfacción, ese sería su “canje” ideal. ¿por qué crees que canjeaba su tiempo Miguel Angel, mientras se colgaba de la Capilla Sixtina? Por satisfacción por felicidad, y claro así tuvo el éxito que tuvo… y todos y cada uno de los anteriormente ¡¡hicieron exactamente lo mismo!!
Debemos recordar que las tareas o actividades importantes son aquellas que están enfocadas y encaminadas a la realización de nuestros objetivos, luego debemos dar absoluta prioridad a los minutos disfrutados en esas actividades.
Como ves cuando se trata de nuestro leitmotiv, de nuestro sueño dorado, digo disfrutados, y no gastados o invertidos, pues en ellos lo único que vamos a conseguir es divertirnos, apasionarnos… diría gastados si se usan delante de un televisor, y posiblemente invertidos si se trata de una actividad de la cual no podemos escapar, como por ejemplo trabajar, hacer chapuzas en casa, comer – ¡eh! Que en este caso también se pueden disfrutar – e incluso dormir.
1440 minutos ¿te parecen muchos? Parezcan los que nos parezcan, son inamovibles, pero si podemos intentar aprovecharlos optimizando nuestro tiempo al máximo. Si nos enfocamos a intentar ser mejor, creciendo cada día y superándonos, empezaremos a descubrir que mejorará nuestra gestión del tiempo, seremos más efectivos.
La prisa el ajetreo son una constante en nuestro quehacer diario, pero ¿Sabes que significan 15 minutos? El 1,04% del tiempo del que disponemos diariamente para nosotros…
Le dedicamos tiempo a nuestro jefe, a nuestra mujer, hijos, clientes, vecinos, extraños, a la televisión, al gimnasio, a la radio, al ordenador, al periódico, al partido de futbol ¡a tocarnos las narices! y … ¿no podemos dedicarnos diariamente 15 minutejos a nosotros mismos? ¿A qué? Pues a reflexionar, a planificar, a pensar, a meditar a modificar nuestras actitudes… ¡A tantas cosas! ¡Hagámoslo!
Para finalizar, sin ser pesado, y dado que dicen que una imagen vale más que mil palabras, te dejo con un anuncio de Mercedes Benz que trata sobre el tema y que es muy clarificador ¡Que tengas buen día!
3 comentarios en «1440, la maldita ley del tiempo»