Si, digo bien, «una vez escribí un cuadro, no lo pinté» y no, no es el de la foto. Pero como no tengo la foto del cuadro al que me refiero te ponga la de este, que también es mío, y así relleno hueco. ¡Ya sabes!
Hace años me dió por pintar cuadros, me podía haber dado por morder esquinas o peinar bombillas…..y en una ocasión se me ocurrió plasmar en uno de ellos el texto de una desiderata anónima muy extendida, que quizás conozcas y que desde siempre me encantó.
LLevaba unos días buscándola entre mis archivos porque quería subirla al blog, pero no había manera de encontrarla. Y en internet tampoco la encontraba, y no encontrarla en internet empezaba a preocuparme de verdad. ¿No daré con ella jamás?.
Estarás pensando:»leñe pues busca el cuadro y ya está». El caso es que se lo regalé años atrás a una buena amiga mía y no quisiera yo ponerla en el compromiso de que no sepa o no se acuerde donde lo guardó y esas cosas que pasan…. ¡Tu ya me entiendes¡
Y casualidades de la vida -ya estamos con las casualidades otra vez- resulta que retomando el contacto con una vieja amiga, Natalia, -vieja, por lo de antigua , no por ser mayor-, estando hablando del blog y sin venir a cuento va y y me lo envía por email, comentándome que lo tiene enmarcado desde hacia años en su casa y que ha sido y es fuente de inspiración diaria.
Dicho lo anterior, ahí va el texto de la desiderata, que por cierto dicen que es un anónimo que se encontró en una iglesia americana en los años 60. Pues amigo, seas quien seas, gracias por «olvidarla» allí.
Muévete plácidamente entre el ruido y la prisa,
y recuerda la paz que puede haber en el silencio.Sin renunciar a ti mismo, esfuérzate por ser amigo de todos.
Di tu verdad tranquila, y claramente.
Escucha a los otros aunque sean torpes e ignorantes; también ellos tienen una vida que contar.
siempre habrá alguien mejor o peor que tú.
Alégrate tanto de tus realizaciones como de tus proyectos.Ama tu trabajo aunque sea humilde; es un tesoro en tu vida.
Sé prudente en tus negocios, porque en el mundo abundan las gentes sin escrúpulos. Pero que esta convicción no te impida reconocer la virtud que hay en ellos; hay muchas personas que luchan por hermosos ideales y dondequiera que vayas, la vida está llena de heroísmo.
Sé tu mismo. Sobre todo no pretendas disimular tus inclinaciones. No seas cínico en el amor, porque cuando aparece la aridez y el desencanto en el rostro, se convierte en algo tan perenne como la hierba.
Acepta con serenidad el consejo de los años y renuncia alegremente, confiado y sin reservas a los dones de la juventud.Fortalece tu espíritu, para que no te destruyan inesperadas desgracias. Pero no te crees falsos infortunios; muchas veces, el miedo es producto de la fatiga y la soledad.Sin olvidar una justa disciplina, sé benigno contigo mismo.
No eres ni más ni menos que una maravillosa criatura en el Universo, tienes derecho a estar aquí. Y, si no tienes ninguna duda, el Mundo se desplegará ante ti.
Vive en paz con Dios, no importa cómo lo imagines.Y sin olvidar tus trabajos y aspiraciones, mantente en paz con tu alma, pese a la ruidosa confusión de la vida. Pese a sus falsedades, penosas luchas y sueños arruinados, la Tierra sigue siendo hermosa.Sé cuidadoso y lucha por ser feliz.