Quizás te suene paradójico, pero tu propósito en este vida es encontrar el camino a tu destino. ¿Lo ves lioso?
Déjame que me explique. Por diferentes que nos creamos que somos, piénsalo bien, tenemos un único destino en la vida y es Ser feliz, plenamente feliz. Lo único que puede ser diferente es la manera de conseguirlo, el camino que al recorrerlo nos hará sentirnos felices y en paz.
La felicidad es algo que ya somos y que está en nosotros, llegar a entender y saber esto, es mi camino a la felicidad. Antes recorrí otros muchos caminos y me sirvieron tan solo para saber que no eran esos los que había de recorrer si destapar la felicidad que hay en mi y que yo soy, era mi destino y mi propósito en la vida.
Quizás al igual que yo hayas de recorrer esos y otros muchos caminos para encontrar el tuyo, aquel que te llevará directo. La cuestión es, ¿qué podemos hacer tú o yo para encontrarlo sin demasiadas demoras y sufrimientos? Porque la cuestión es, ¿son necesarias esas demoras y esos sufrimientos? Mi respuesta es, no. Somos nosotros los que decidimos y nos apegamos de manera inconsciente a ciertos caminos que nos van a demorar y causarnos dolor. A veces pienso que fuéramos masoquistas.
Las cosas de la vida, la vida misma, es más sencilla que todo esto. Pero nos empeñamos en complicarla. De esto se encarga un profesional del asunto, conocido coloquialmente como «ego«. El mejor consejo que puedo darte es que lo ignores por completo, que lo pases por alto. La vida solo nos pide esto, ignora a tu ego y notarás que lo que queda, es simple y llanamente el más grande de los éxitos, la felicidad y paz perfectas.
El ego es el creador de la ilusión del tiempo, del dolor del pasado y de los temores del futuro, del sentimiento de culpabilidad, de la emisión constante de juicios, de todos los resentimientos, del miedo, del sufrimiento, de la enfermedad y el dolor.
La buena noticia, es que ni tú ni yo somos él. No somos el ego. No somos la parte de la mente empeñada en fabricar ilusiones sustentadas en falsas creencias y de la constante emisión de juicios. Teresa de Jesús a este ego lo llamaba «la loca de la casa». Es esa vocecita a la que llamas pensamiento, que no hace más que tocarte las narices en todo momento incluso cuando estas dormido.
No imaginas cuanta paz puede haber con el silencio de esa voz, miedosa y cruel.
El éxito es conseguir nuestros objetivos. Nuestro objetivo mayor ha de ser alcanzar la perfecta felicidad. La perfecta felicidad no es algo que se pueda alcanzar pues ya es nuestra, está en el silencio y en la ignorancia de eso llamado ego. Es nuestra esencia. Es nuestro ser. Mira a ver que sientes al respecto. Luego el éxito, no está en alcanzar o conseguir, si no en ser.
Podrás tener infinidad de cosas materiales, coches, casas, mujeres, dinero, reconocimiento y un futuro brillante y prometedor, pero, ¿y la felicidad? Párate y date cuenta que la felicidad es un sentimiento, es una abstracción, por mucho que pueda parecértelo no tiene forma de coche, ni de casa, ni de playa paradisiaca, ni de mujer exuberante.
La felicidad no tiene forma, es el estado mental de una mente sana que reconoce que la felicidad es nuestra verdad y que solo hemos de decidir no oponernos a ella identificándonos con nuestro ego.
Podrás perseguir y recorrer caminos llenos de cosas materiales y tan solo sacarás de ello el reconocimiento de que esos, no eran el camino que te lleva a la felicidad, si aprendes esta lección habrá merecido la pena recorrerlos y creeme tarde o temprano la aprenderás.
Algunos aprenden de sus propios errores y otros también de los errores y experiencias de los demás. Algunos aprenden leyendo libros o sabiendo escuchar a personas que tienen en verdad cosas que contar. No tenemos porque transitar todos por los mismos caminos, si aprendemos a escucharnos en silencio cuando el ego calla por fin, habremos aprendido lo que mil vidas dando vueltas por ahí.
La felicidad no es el destino, la felicidad es el camino. La felicidad está en ti.
En mi opinión, el éxito, volver a alcanzar el estado de felicidad y paz plenas no es un camino de ida, es un camino de vuelta. Siempre fue nuestro punto de partida del que una vez decidimos alejarnos y al alejarnos de Él, nos alejamos de todo, y el ego, desde nuestra inconsciencia entonces tomó las riendas y la dirección de la marcha. Se consciente de este hecho. La felicidad no es un lugar, ni una cosa que puedas tocar, la felicidad es lo que tú eres. No concibo mayor éxito que volver a lo que siempre hemos sido y ha sido nuestro.
Libérate de tus miedos pueriles, metas absurdas, pensamientos efímeros e ideas muertas, y mira dentro de ti. Allí dentro esta el mayor de los éxitos que jamas pudieras imaginar. El verdadero Tú.
Alguien dijo una vez que la mayor aventura era la aventura interior. No busques fuera lo que está dentro. No pierdas más el tiempo. No es necesario.
Wow, un despertador a la conciencia, Gracias!!!